FDM o SLA: ¿Qué tecnología de impresión 3D elegir?

FDM o SLA cual elegir

La tecnología Polyject, así como la FDM son los dos métodos de impresión que utilizamos en Impresión i3D, ambos métodos son de la más alta calidad. La tecnología FDM se logra mediante aplicación de calor a filamentos plásticos, que permiten obtener diferentes tipos de acabados superficiales dependiendo del extrusor que se utilice. Este método nos permite alcanzar una precisión de hasta 16 micras sobre el diseño deseado. La tecnología FDM utiliza materiales a base de resinas, en Impresión i3D contamos con resinas de estilo Vero White, Vero Clear, Tango, Tango Grey, Tango Plus, Durus, y MED. Además de estos métodos de impresión previamente mencionados, existe el método SLA. Este consiste en la aplicación de luz láser a un material líquido fotosensible, tiene un buen acabado superficial pero una resistencia menor a la que se obtiene con el método FDM. A continuación, se invita al lector a conocer más acerca del método FDM así como también del método SLA Tanto el proceso FDM como SLA tienen pros y contras que debes considerar. Si bien es cierto que la primera tecnología corresponde al 70% de las impresoras 3D en el planeta, la segunda fue desarrollada antes y presenta cualidades interesantes. Diferencias entre el proceso FDM y SLA Nos parece importante aclarar que estos métodos de fabricación aditiva poseen un funcionamiento similar: elaboran los prototipos capa por capa. La diferencia consiste en que mientras la estereolitografía (SLA) utiliza un láser que endurece la resina de manera directa, el proceso FDM deposita el material dentro del área de impresión para su posterior solidificación. Para ponerlas en contexto, veamos los aspectos más relevantes al momento de imprimir en 3D: Materiales. El avance de la tecnología FDM se fundamenta en el uso de materias primas a partir de plásticos, madera, acero y diferentes mezclas. Son comunes el PLA, ABS, Nylon y PETG. En cambio, la SLA está limitada a filamentos producidos por FormLabs, conocidos como resinas estándar, dentales, castables y de ingeniería. Colores. Si el color es relevante para sus piezas o prototipos, la tecnología SLA cuenta con menor gama de opciones. Aunque puedes conseguir un kit de colores, son habituales las resinas transparentes, blancas, grises y negras. En tanto, con el FDM hay mayor variedad y sus filamentos tienen un diámetro que oscila entre 1,75 mm a 2,85 mm. Soportes. La adherencia a la cama o eliminación de soportes varía para cada sistema. Con el proceso FDM puedes retirar el material de la base con la mano o utilizar productos como el Smart Stick, y existe el HiPS o PVA para quitar los apoyos. Aunque la técnica SLA es fácil de retirar, la cama queda llena de resina y esto requiere cierto grado de limpieza. Además, hace falta el uso de alicates y un postprocesado para remover los soportes. Acabado. En la precisión y calidad es donde sin duda destaca más la SLA. En función del láser, puede obtener superficies tan lisas como de 0,025 mm, detalles más logrados y prototipos funcionales. Por otro lado, el FDM depende de la boquilla de extrusión y la calibración de los movimientos de la máquina. Si no son piezas complejas, obtiene capas de hasta 0,125 mm y el uso de soportes quita uniformidad, requiriendo un procesamiento adicional. Post procesado. Una vez que termine la impresión usted va necesitar terminar de procesar la pieza. Con FDM puede retirar los soportes con una herramienta simple y lijar o pulir con Polysher. Con SLA, debe bañar la pieza en alcohol isopropílico para eliminar los restos de resina y remover los soportes con cualquier herramienta. La elección del proceso FDM o SLA dependerá de las expectativas que tenga con respecto al uso de la impresión 3D. Mientras que la primera tecnología está más difundida y es más barata, la segunda resulta más cara y consigue productos de mayor calidad. Si quiere más asesoría, cotice sus proyectos con nosotros.